El policía estaba fuera de servicio y se encontraba de vacaciones acompañado de su mujer para lo cual había alquilado una vivienda en la zona. Sobre las doce y media, desde la playa observó que dos bañistas extranjeros, uno francés y otro alemán que estaban en el agua, tenían problemas para seguir a flote y pedía socorro a gritos. Inmediatamente saltó al agua con intención de ayudarlos. Sin embargo, no logró llegar hasta donde estaban. La zona es conocida por las fuertes corrientes de agua.

Según el relato de Diario de Cádiz, detrás de él se lanzó al agua también para socorrer a los bañistas una chica extranjera que trabaja en una escuela de surf de la zona. Los dos bañistas habían conseguido agarrarse a una de las boyas de señalización y la chica los ayudó a llegar a la orilla. No se había percatado que junto a ella el Policía también se había lanzado al rescate. La mujer del fallecido fue quien se lo dijo y la joven extranjera volvió al agua pero ya no encontró rastro de él.

Inmediatamente se inició un dispositivo especial de búsqueda en el que participó el Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, que fue quien localizó el cuerpo, dos patrulleras de este cuerpo, buzos de la Policía Nacional, Salvamento Marítimo con una embarcación y un helicóptero y un buque de la Armada que estaba en la zona.

Encontraron el cuerpo sumergido a unos 400 metros del lugar en el que se le vio por última vez, sobre las cinco y media de la tarde. Con una zodiac trasladaron el cadáver hasta el puerto de Conil y desde aquí al Instituto de Medicina Legal de Cádiz para practicarle la autopsia. Según Diario de Cádiz, en un primer examen realizado por el forense, se apuntó a algún percance como un calambre o un corte de digestión, como la causa del ahogamiento.

El Policía, que no tenía hijos, era de Sevilla y había llegado destinado a la comisaría de Alcalá a principios hace menos de un mes. Él mismo había pedido el cambio de destino. Estaba adscrito al grupo de Seguridad Ciudadana y anteriormente había trabajado durante cuatro años en la Comisaría de Nervión (Sevilla), desde que juró su cargo.

El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, se encontraba de camino a la zona cuando localizaron el cuerpo del policía desaparecido.

El Ayuntamiento de Alcalá ha decretado luto oficial por el fallecimiento del policía para la jornada de hoy y las banderas del Consistorio ondearán a media asta. La portavoz municipal, María José Borge ha manifestado que “hoy es un día triste para la ciudad, por la muerte de este agente que fallecía en una acción heróica; el Ayuntamiento de Alcalá lamenta esta trágica pérdida y quiere mostrar su más sentido pésame a la familia en estos momentos de dolor”.

El secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, ha impuesto hoy jueves en Sevilla la Medalla de Oro al Mérito Policial a título póstumo a Carlos Calderón Arias, en un acto celebrado en la sede de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Occidental. Al acto han asistido los padres, la mujer y amigos y compañeros del fallecido, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó; la subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero; la delegada del Gobierno de la Junta en Sevilla, Carmen Tovar, el alcalde de Alcalá de Guadaíra, Antonio Gutiérrez Limones; el delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Sevilla, Demetrio Cabello o el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla, Juan Roldán, entre otros.