El precio puede parecer bajo, pero la empresa que lo ha adquirido tendrá que hacer frente a las caras hipotecarias que pesan sobre el hotel que ascienden a 84 millones de euros. Lo que la empresa ha adquirido son unas lujosas y amplias instalaciones que incluyen 137 habitaciones, un complejo de piscinas cubiertas y spa, un helipuerto, un lago artificial, salones para celebraciones y congresos, cien plazas de aparcamiento, un restaurante, zonas verdes y un centro ecuestre con boxes, espacio para el cuidado de los animales y pista para exhibiciones.

Para poder volverlo a poner en marcha serán necesarias inversiones. El hotel ha estado permanentemente vigilado, por  lo que no se ha producido el expolio de las instalaciones, pero el edificio, situado en el campo, presenta el deterioro lógico de seis años cerrado. Por ejemplo se ha perdido la vegetación y  las abundantes palmeras que había en el recinto. Además del hotel también han sido vendidos por 400.000 euros los muebles, el menaje y los cuadros.

Con esta venta se pone fin a un largo proceso concursal y se abre la posibilidad de que Alcalá pueda volver a tener un establecimiento hotelero de primer nivel.