La división interna en el PSOE de Alcalá ha propiciado que de nuevo el partido no haya contado con mayoría absoluta para sacar adelante sus propuestas o rechazar las de la oposición en el Pleno municipal celebrado este viernes por la mañana. La concejal socialista, Laura Ballesteros, que hace unos días anuncio su marcha del partido y del grupo municipal para rectificar poco después, ha optado por declarse ausente (aunque siguió en la sala) cuando se inició el debate de una propuesta conjunta de los grupos de la oposición sobre la publicidad institucional del Ayuntamiento. Durante el resto del Pleno mantuvo la disciplina de voto.

La oposición reclamaba que los anuncios publicitarios que el Ayuntamiento insertara en los medios de comunicación se repartieran según criteros equitativos y atendieran a la difusión de cada publicación y que además dicho reparto publicitario estuviera sometido a la vigilancia de la Junta de Gobierno en la que tienen representación los grupos de la oposición. El gobierno local argumentó en contra de esta medida, pero a la hora de votar volvió a producirse un empate entre la oposición y los socialistas que no contaron con el voto de Laura Ballesteros. El alcalde de nuevo tuvo que hacer valer el voto de calidad que le otorga la legislación en caso de empate en las votaciones. Ya en un Pleno reciente se vió obligado a tomar la misma medida al ausentarse precisamente Laura Ballesteros y también José Manuel Rodríguez, si bien en esa ocasión también faltó al Pleno uno de los ediles del Partido Popular, por lo que la situación también era de empate entre oposición y gobierno.

En el debate salió a relucir el pago de 15.000 euros realizado por la empresa municipal Alcalá Comunicación a una empresa de Dos Hermanas por publicidad en un periódico.

Laura Ballesteros advirtió en su día tras optar por continuar en el PSOE después de su anuncio de abandonar la formación, que no había dado un "cheque en blanco" y que no había temas con los que no estaba dispuesta a transigir.