Para ello proponen la implantación de la zona azul en algunas de las bolsas de aparcamiento existentes en el centro como la Plaza del Duque, San Francisco, el Museo o el Callejón del Huerto; así como en las calles Nuestra Señora del Águila, Alcalá y Orti, San Sebastián, Madueño de los Aires y Mairena. Se trata de una fórmula más reducida de la que en su día planteó llevar a cabo el Ayuntamiento que abarcaba desde la Casa de la Cultura al Perejil,

FICA considera que la fórmula de la zona azul “no puede ser contemplada como una vía de recaudación municipal, sino como un medio para facilitar la actividad comercial”. Al mismo tiempo establece algunas premisas que considera necesarias en la definición del sistema de regulación de aparcamientos: los precios deben ser asequibles y progresivos, el horario regulado debe limitarse al de apertura de los comercios y se deben contemplar condiciones ventajosas para el estacionamiento de vehículos de los vecinos de las zonas afectadas.

Para paliar la falta de aparcamientos en la zona, los empresarios apestan por la construcción de un nuevo aparcamiento público con plazas para residentes en el antiguo mercado de abastos, ahora sin uso. También creen que sería positivo llegar a un acuerdo con los aparcamientos del actual Mercado de Abastos y con los de la calle Mairena para lograr descuentos especiales para quienes realicen compras en la zona centro.

FICA cree que el acceso al centro se facilitaría con la creación de paradas de autobuses urbanos en puntos como La Plazuela, donde se han eliminado tras las obras de peatonalización y en la Plaza de Don Paulino, para dar servicio además al Mercado de Abastos, tal y como el Ayuntamiento prometió a los comerciantes.

La Federación que representa a comerciantes e industriales cree necesario hacer un estudio serio y riguroso del tráfico en la localidad, en especial en la zona centro, donde presenta mayores problemas. Las propuestas formuladas por dicho estudio, que según FICA debería realizar una empresa especializada, tendrían que poner fin a la actual improvisación y cambios continuos en la ordenación del tráfico. No sería la primera vez que el Ayuntamiento encarga un informe de esta naturaleza, sin embargo, las conclusiones de los que ha realizado anteriormente no han llegado a materializarse en medias concretas, por lo que los empresarios creen que antes de hacer uno nuevo, el Ayuntamiento debería adquirir el compromiso de la puesta en marcha de sus recomendaciones.

La reordenación del tráfico debe ir acompañada por un plan de señalización que oriente a los conductores sobre los accesos al centro y a los edificios más relevantes de la ciudad, considera FICA.