Casi veinte años llevamos con las barbas en remojo. El tiempo que hace que a nuestros vecinos de Gillette vimos las suyas afeitar.  Parecía que aquello no iba con nosotros a no ser que fuésemos uno de ellos  o, como muy cerca, de su familia. La deslocalización era un fenómeno que por entonces no tenía ni nombre y se hablaba en términos de “que se llevan la fábrica a…”

18 de diciembre.

Santoral: Ntra. Sra. de la Esperanza. ¡Vaya paradoja!

Despertamos  de aquel mal sueño sobre un vencido colchón FLEX que cambió el compás de la soleá por la saudade de un fado portugués. La mañana amaneció  helada  como las cámaras huecas  de la Menorquina. Al alba hoy tampoco cantó el gallito promotor, y es que  la gallina de los huevos de cemento hace ya unos años que se quedó clueca. Te palpas el trasero,  y aunque esté partido en dos, resulta que solo podemos quedarnos con un culo al aire. En las noticias nos cuentan el cuento de que hay déficit de posaderas para mantener  tanta fabricación de  taza de porcelana. Con tanto ERE que ERE, la dura Roca se acabó ablandando y alguien tiró de la cadena  sin preguntar si habíamos terminado de satisfacer todas nuestras necesidades.

Me miro al espejo. Aún tengo espuma de afeitar en la cara. Me pregunto si me cortaré con la maquinilla marca NISU y así aportaré mi cuota a la sangría que no cesa. Agarro una toalla, la levanto con una mano y, suspendida en el aire,  dudo si tirarla al suelo. La barba sigue en remojo después de casi veinte años. Finalmente decido secármela con alguna de las que he ido apilando los días anteriores.

3 de diciembre.

Toalla 1. Amano y Amaquina.

Desde el escaparate de Mancha, en la calle La Mina, unos llamativos personajes me miraron con sus pares de ojos de cristal. Unas simpáticas marionetas con un punto estrafalario, aunque clásicas en su confección. Parecían fruto del matrimonio entre un teleñeco y una lunnis. La prole que se asomaba en la vitrina de este tradicional comercio era numerosa y bastante heterogénea, resultado de una ley combinatoria de telas, colores y pelajes, cuya máxima es no repetir dos soluciones idénticas. Todas son modelos únicos.  No pude resistirlo, compré una. Justifiqué la adquisición pensando en la sorpresa que se llevaría mi hija cuando la viera, como así fue. La verdad es que la compré para mí. Es una pieza de autor y algo me daba que detrás había una valiente apuesta creativa.

En ese nuevo patio de vecinos que son las redes sociales, descubrí que estas criaturas son creaciones de Pilar Díaz Mancha y Julio García Garnateo. Su apuesta se llama Amano y Amaquina . Me cuenta Pilar que les surge la idea de fabricar marionetas por casualidad, al ver un pequeño títere que le iban a regalar al hijo de un amigo.  Le recordó los días en los que con sus hermanos hacía marionetas con calcetines para entretenerse. Pensaron que era algo que podían fabricar con una inversión relativamente pequeña. Sus expectativas son buenas, aspiran a optimizar la producción con la experiencia de la venta, pero sin perder el valor de la producción artesanal.

7 de diciembre.

Toalla 2. Gastrogón. Taberna gastronómica.

Ahora que lo habitual es cerrar puertas, en la calle Pescadería se abre una al paladar. Un lugar que se define con nombre de tradición (taberna) y apellido de experimentación (gastronómica). Estos son los dos principales ingredientes que Gonzalo Mancera combina en esta nueva propuesta que nace con vocación de ser un referente más allá del ámbito local. Aunque acaba de instalarse, no es un recién llegado,  y  viene con la despensa llena de  experiencias de los muchos fogones por las que ha pasado. Algunas de sus creaciones ya son “re-creadas” en otras cocinas, como es el caso de su especialidad las virutas de foei. Otro ejemplo de hacer nuevo lo de siempre, es su espuma de poleá, un guiño a la gastronomía local.

Descargo de objetividad: tengo la suerte de ser amigo de Gonzalo. También quiero disculparme en nombre del director de este medio, ya que Gastrogón es uno de sus  anunciantes. Todo lo que he comentado quedará corroborado cuando vayan a probarlo. O cuando vengan los señores de Michelin. Tiempo al tiempo.

14 de diciembre.

Toalla 3. Vega Oliva. Aceite ecológico

Cafetería El Mirador. Puesta de largo de Vega Oliva, el primer aceite virgen extra ecológico de Alcalá. Elaborado con la inusual variedad,  para este menester, de aceituna manzanilla, se mima hasta al extremo  su producción y  su recolección es  a mano, una a una, como hacía Juan Valdés con el café. Pero es otro Juan, de apellido Hurtado, quien con el apoyo de su familia ha cambiado la gestión de unidades de aprovechamiento urbanístico por aprovechar cada unidad de oliva hasta extraerle la última gota del oro líquido.

A Juan me lo encontré en el mismo sitio, El Mirador, justo una semana después en la presentación de la última novela de José Antonio Francés. Aunque a primera vista pudiera parecer que su iniciativa es otra idea descabellada, de la conversación que mantuvimos deduje que si lo que está embotellando es, como él mismo transmite, entusiasmo con  altas dosis de ilusión, el producto seguro que es exquisito. Los alemanes andan muy interesados y los japoneses ya le han echado el ojo. Habrá que probarlo antes de que no sea posible.

16 de diciembre.

Toalla 4. DENKI. Diversiones solares

Mucho ambiente en el mercadillo navideño del comercio local en La Plazuela. Entre todos los tenderetes me llama la atención uno por culpa del movimiento de las aspas de un molino de viento. Sobre el tablero una colección de juguetes, cachivaches de lo más curioso, todos ellos impulsados por la energía del astro rey mediante pequeñas células fotovoltaicas. Un carrusel,  coches, robots, aerogeneradores, un pequeño laboratorio,…  una amplia colección de diversiones solares, como a los componentes de DENKI les gusta llamar. 

Ellos no son unos vendedores al uso. DENKI Estudios y Proyectos Energéticos, S.L. es una ingeniería alcalareña ligada al sector de las energías renovables y la eficiencia energética. Sus kits de montaje están enfocados a los más pequeños de la casa, para que se vayan concienciando de la necesidad del ahorro de energía, y comprendan los beneficios que las energías renovables nos aportan. No quieren quedarse solo en la venta de los productos que distribuyen, pretenden ir más allá y llegar a realizar juegos a medida, talleres para niños y nuevos kits didácticos diseñados por ellos mismos.

28 de diciembre.

Santoral: Los Santos Inocentes.

Quizá estas toallas no sean suficiente bálsamo para el jarro de agua fría que supone la noticia de Roca.  Sin embargo, todas estas iniciativas tienen un denominador común: sus emprendedores desbordan entusiasmo y confianza en lo que están haciendo. Darle la vuelta a lo de siempre, plantarse en la calle a venderlo sin complejos, innovar haciendo las cosas de otra manera, apostar por la agricultura ecológica, pensar en lo global desde lo local, apoyar las energías renovables y la eficiencia energética, volver a producir nuestras propias cosas ya sea a mano o a máquina, reinventarse al fin y al cabo,  son los caminos alternativos por los que transitar.

Venimos de un tiempo en que nos movíamos por seguras autopistas, a velocidad de crucero y parando sólo para repostar. Parece que eso quedó atrás. Lo que nos queda es echarnos al monte por alguno de los nuevos  senderos que se abren. La travesía no será cómoda, pero puede ser divertida por lo aventurado del viaje, y cuando lleguemos a la cima, seguro que disfrutaremos de unas buenas vistas. Sí se apuntan a la excursión, no olviden meter en la mochila su toalla. No vayan a tirarla.

@AGarciaCalderon