El Equipo de Gobierno atacó ayer a Ballesteros al afirmar que “no se entienden los viajes de ida y vuelta de la hasta ahora concejal socialista Laura Ballesteros”. Se cuestionan además cómo “una persona que ha sido concejal durante 14 años desempeñando cargos de responsabilidad tan relevantes como la portavocía del grupo o como concejal de hacienda y vivienda, entre otros, puede argumentar su salida precisamente en aspectos como las políticas sociales, los desahucios o el aumento del IBI”.

Rechazan las acusaciones sobre falta de transparencia y asegura que Ballesteros puede pasar a la historia, si mantiene su decisión como “la concejal tránsfuga que vulneró el resultado de las urnas en las pasadas elecciones municipales”.

Por su parte, el alcalde, Gutiérrez Limones, que en el anterior anuncio de renuncia de Laura Ballesteros no llegó a manifestarse en público sobre el tema y que no se ha reunido con ella ni entonces ni posteriormente, ha emitido un comunicado en el que no nombra a la concejal y afirma que “creo que en estos momentos lo último que necesita Alcalá es inestabilidad y confío en que la responsabilidad de todos, y el respeto a los compromisos adquiridos ante la ciudadanía, prevalezcan”.